Durante el fin de semana, estuve conversando con una persona que ha estado esporádicamente en mi vida, pero que siempre deja su huella.
Hace mucho que no habla con mi padrino, así que me decidí a llamarlo, y la verdad que me dejó para adentro todo lo que ha pasado y sufrido en el último tiempo.
Primero que nada, no encuentra trabajo, a pesar de ser Ingeniero, de haber trabajado en Endesa, de tener muchos conocimientos, ser inteligente y muy educado, no encuentra trabajo más que de cocinero en un puesto en el Persa Bío-Bío, por tres mil pesos diarios.
Tiene su casa, es propia, pero no puede vivir ahí ya que su hijo, que padece de esquizofrenia, lo golpea y lo ataca cuando están solos. Así que está de allegado en la casa de un familiar, donde a veces ha tenido que dormir en la calle, ya que le trancan la puerta y no lo dejan entrar.
El es una buena persona, no tiene vicios, se esfuerza por cuidar a su hijo pero no tiene los medios necesarios, una clínica de rehabilitación cuesta un millón y medio mensual, dinero que es prohibitivo.
Se ha dedicado a aprender Reiki, hace yerbas medicinales, aromaterapia y todo lo que puede ayudar a sanar el cuerpo.
Quiero ayudarlo, pero igual tengo las manos atadas a mis problemas.
Una posibilidad es hacerle propaganda por medio de este blog, para que venda sus yerbas medicinales, y si alguno le interesa lo podríamos contactar y los va a visitar al trabajo.
Me dio mucha pena verlo, y saber que tiene que estar caminando en la calle todo el día ya que no puede estar tranquilo en la casa donde vive.
No creo que una persona con su capacidad merezca esto.
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