Superhéroes

Se produjo una discusión trascendental, de máxima notoriedad, que incluso puede cambiar el curso de la historia de la civilización completa.
Después de unos terremotos y réplicas sobre una mesa coja, con el penetrante olor a pipeño que emanaba de los cuerpos de los comensales históricos, el cuchitril de mala muerte se transformó en el lugar perfecto para filosofar sobre cuál de los superhéroes debe ser considerado el mejor.
Los argumentos fueron variados, desde considerar el hombre murciélago el mejor, ya que es un superhéroe fuera de serie por ser el único que no tiene poderes especiales. Hasta el hombre de acero que es un superhéroe por naturaleza, ya que es el único que se tiene que disfrazar para dejar de ser superhéroe.
La verdad sea dicha, no recuerdo el resultado de la discusión, o si hubo conclusión alguna. Sólo recuerdo el sabor del helado de piña mezclado con un pipeño bigoteado, y una acidez que media docena de Eno limón no lograba pasar. Ni hablar del dolor de cabeza.
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Los superhéroes dan dolor de cabeza y acidez, eso es lo que saco en conclusión.