martes, junio 13, 2006

Reclamando por todo

Durante el fin de semana estuve en cama, cuidándome de un posible resfriado, así que tuve tiempo de ver mucha tele, en realidad vi demasiada televisión.
Así que, aparte de tener entumecida una parte del cerebro, tuve tiempo de analizar varias cosas y estas son mis conclusiones:
Alza de la bencina: Está bien que suban los precios, es más, deberían triplicar el impuesto único de los combustibles, de tal manera que nadie pueda pagar por la bencina y se deje de usar el automóvil. Estoy con los malestares propios del exceso de contaminación, así que mientras menos vehículos circulen, mejor voy a estar, los automovilistas no me pagan los remedios, ni la consulta del doctor, ni mi tiempo que paso enfermo. Si quieren usar el automóvil y contaminar que paguen.
Llamadas por teléfono: No hay nada que me moleste más que llamen por teléfono, cuando estoy con dolor de cabeza, para ofrecerte servicios de Internet. Lo odio, nadie debe llamar a nadie que no conozca, el vendedor no me conoce y me trata de tú y más encima quiere mi dinero. Las compañías de teléfono ganan por cada llamada cursada, así que no les interesa bloquear los llamados de vendedores.
Fútbol, fútbol, fútbol: Me gusta ver de vez en cuando los buenos partidos, pero no puedo tolerar a los “comentaristas”, la verdad es que apestan, molestan, habla estupideces, tienen sonsonetes impostados, aduladores de todos. Debería empezar el partido, una breve introducción, decir los equipos que juegan, el lugar donde juegan, quedarse noventa minutos en silencio y después decir gracias por su preferencia. ¿Sabrán los productores de televisión, que se ahorrarían al menos dos sueldos millonarios, viáticos, regalías y demases, si tan solo le pagaran a una persona para decir diez palabras? Tampoco me interesa saber cómo celebraron otras personas un triunfo que a mi no me interesa, ni me afecta.
Periodistas poco profesionales: Me molesta la falta de profesionalismo, o mas bien el nulo profesionalismo, no, las personas que ejercen una profesión muy importante como el periodismo, pero pareciera que le regalaron el título. Me refiero a la cobertura que una periodista hizo a la cena de la Presidenta en Estados Unidos, por un grupo de mujeres importantes, lo único que era importante, relevante y digno de destacar, era que el vestido que usó la Presidenta era el mismo que usó en la investidura. Por favor, cuando el Presidente Lagos usó el mismo terno en diferentes ocasiones, ¿alguien lo hizo notar?
Repartidor de gas: ¡Déjate de golpear los balones que me duele la cabeza!
La verdad sea dicha, no sirvo para estar en cama.